Y me dormí de nuevo.
Tengo algo con esas reuniones en las que los tipos no paran de hablar intentando convencer a un auditorio que está más para una siesta -como la que tuve yo- que para escucharlo.
Y esta vez volé.
Hacia una Libertad que no tengo. Donde no existen ataduras de ningún tipo.
Ni sociales, ni legales, ni económicas.
Pero aquí estoy de nuevo. Sentado en este ordenador de mi vida.
Cumpliendo mi rol social, legal y económico.
Te hiciste el "noni noni" durante el "brainstorming"??
ResponderEliminarsomos dos.
Un abrazo.
Bueno, normal... un@ se duerme en esas cosas o deja volar la imaginación para evadirnos del papel que nos ha tocado en el juego de la vida.
ResponderEliminarTiene un no sé qué de melancolía tu minirrelato.
Un besote David
Me acuerdo de la primera parte. Hay que cortar con esas ataduras, y si dormirse y volar es la forma, entonces: adelante.
ResponderEliminarContiene una reflexión muy interesante de protesta.
Cariños!
Pies, para q los quiero.. si tengo alas pa´volar!!
ResponderEliminarMe recordaste esa frase de Frida, una de mis ídolas!!
Cariños!