
Yo no quería venir, pero ella insistió. Viste las mujeres, cuando se trata de salir a comprar y más en estos lugares. Dicen que se consigue de todo y a buen precio. De todo, sí. Podés decirlo. Los puestos callejeros que conviven con los locales lujosos y los desvencijados autos de comienzos del anterior siglo con los alemanes de alta gama último modelo. En el medio no hay nada. Conviven, sí, y hasta parece que se entienden cuando el pibe que vende valijas en la esquina se acerca al Audi polarizado y le entrega unas bolsitas blancas al tipo a cambio de unos guaraníes. Los bombones están al mismo precio que en el súper, no comprés y mirá esos repasadores lo que son. Sí, tres por diez, pero miralos, bueno, lleva lo que quieras. ¿Más toallas? no sé...
Y me caigo al piso atropellado por esa señora que sale corriendo del local de perfumes pidiendo a gritos por un policía. Acá no hay policías ó al menos en las horas que estuvimos no vimos ni uno. No para de correr mientras arrastra a una chica tirándola del brazo al grito de: ¡vamos hija!. La sigo por esta ciudad desconocida y en eso me doy cuenta que nos dijeron que nos moviéramos en grupo, entonces me vuelvo y es tal el abarrote de puestos que no recuerdo donde quedó mi compañera, pero al girar nuevamente diviso aún a la mujer con su hija y voy hacia ella. Mi negra se va a arreglar un rato sin mí, pienso. Entonces la alcanzo en un claro de la avenida, cerca del río y me detengo frente a ella. Una hermosa mujer de unos cuarenta años con su hija adolescente. Ambas llorando. Las dos temblando. Cuando se calma un poco me cuenta y me pide ayuda. La única que le ofrezco es cruzar el puente y no regresar.
En esta ciudad se consigue de todo y a buen precio.
De todo, sí. Podés decirlo.
Una niña por un poco de efectivo, por ejemplo.
Relato/reflejo doloroso. ¿Qué hace que una vida se pueda comprar/vender? El sistema. O, tal vez, las y los humanos, parte suya o viceversa.
ResponderEliminarMuy buen texto para mostrar una realidad tan cruel, Dav.
Besos!
Clorinda? Estuve allì, y es como vos decìs.
ResponderEliminarY no sabès lo que es, si pasas con el auto.
Te lo roban a plena luz del sol, y lo meten a un garage delante tuyo. Y se te rien en la cara. Lo perdiste. No te lo devuelven mas, aunque llevès la policia al garage.
Ahì no vuelvo.
Un abrazo.